AutorAnabelDeliciosa crema de calabaza y manzana vegana. Ideal para tus cenas o primeros platos. Receta muy fácil de preparar que además es baja en calorías y grasas.
Lo primero que tenemos que hacer es pelar y cortar en dados las patatas, cebollas, zanahorias y la manzana. Tened especial cuidado en quitar bien el corazón con las semillas de la manzana para que la sopa no amargue.
Ponemos las verduras que hemos cortado en una olla que tenga tapa rápida.
Cubrimos con dos litros de agua y añadimos una cucharadita de sal. Cerramos la olla y cocinamos durante 15-20 minutos.
Transcurrido el tiempo de cocción, abrimos la olla y batimos. Un truco que yo utilizo para que la crema me quede exactamente como yo quiero es sacar bastante caldo, batir e ir añadiendo caldo hasta dejar el espesor deseado. Si te sobra caldo lo puedes guardar para otra receta o congelar.
Añadimos unas ramitas de perejil fresco y batimos. Ya tenemos nuestra crema lista.
Para la presentación podemos añadir un chorrito de aceite de oliva (ya que no hemos utilizado aceite para la cocción) y unas semillas de calabaza tostadas, aunque puedes añadir la semilla que quieras (sésamo, pipas de girasol, nueces....)
Deliciosa crema de calabaza y manzana vegana. Ideal para tus cenas o primeros platos. Receta muy fácil de preparar que además es baja en calorías y grasas. El secreto de su delicioso sabor y textura está en la manzana que ha hace más suave y en el perejil que le da ese toque de sabor especial. Seguro que si la pruebas repetirás.
Es receta de crema de calabaza y manzana vegana la pueden tomar los vegetarianos y veganos, pero también es una receta que gusta a todo el mundo y que además es muy habitual en los primeros platos de los menús del día de cualquier restaurante. A mí personalmente me gusta mucho prepararla para cenar, sobre todo en invierno que apetecen cenas calentitas.
En cuanto a los ingredientes de la crema de calabaza y manzana vegana, todos son muy fáciles de conseguir y muy económicos. Como para esta receta sólo se necesita la mitad de la calabaza, lo que puedes hacer es comprar sólo la mitad (en la mayoría de las tiendas de fruta y verduras te la pueden partir) aunque lo que yo suelo hacer es comprarla entera y utilizar la mitad. Con la otra mitad, si no tienes previsto utilizarla en pocos días, puedes pelarla, cortarla a dados y congelarla para volver a hacer esta receta otra semana.
Un truco que os puedo dar a la hora de hacer esta sopa y cualquier otra es que añadáis el agua sin miedo (2 o 3 litros) y antes de moler la crema, saqueis la mayor parte del caldo para luego irlo añadiendo poco a poco hasta dejar con el espesor deseado. Así no os pasará que os quede demasiado líquida. El caldo que os sobra, lo guardáis para preparar otra receta en la que se utilice caldo de verduras.
Ingredientes
Instrucciones
Lo primero que tenemos que hacer es pelar y cortar en dados las patatas, cebollas, zanahorias y la manzana. Tened especial cuidado en quitar bien el corazón con las semillas de la manzana para que la sopa no amargue.
Ponemos las verduras que hemos cortado en una olla que tenga tapa rápida.
Cubrimos con dos litros de agua y añadimos una cucharadita de sal. Cerramos la olla y cocinamos durante 15-20 minutos.
Transcurrido el tiempo de cocción, abrimos la olla y batimos. Un truco que yo utilizo para que la crema me quede exactamente como yo quiero es sacar bastante caldo, batir e ir añadiendo caldo hasta dejar el espesor deseado. Si te sobra caldo lo puedes guardar para otra receta o congelar.
Añadimos unas ramitas de perejil fresco y batimos. Ya tenemos nuestra crema lista.
Para la presentación podemos añadir un chorrito de aceite de oliva (ya que no hemos utilizado aceite para la cocción) y unas semillas de calabaza tostadas, aunque puedes añadir la semilla que quieras (sésamo, pipas de girasol, nueces....)
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